Se mueren los árboles más viejos y altos del mundo

Redacción

  • Entre 1900 y 2015, se perdió más de un tercio de los bosques primarios del mundo.

Desde hace unos años, en una sequía sin precedentes, las secuoyas gigantes de California, comenzaron a experimentar un cambio extraño. Los científicos advirtieron que algunos de estos gigantes arbóreos de los parques nacionales de las Secuoyas y Cañón de los Reyes estaban muriendo de formas jamás documentadas: de arriba hacia abajo.

Cuando los investigadores treparon hasta las copas, descubrieron que los escarabajos de la corteza habían perforado algunas ramas.

Para 2019 habían muerto al menos 38 árboles. No era una cifra descomunal, pero sí «era preocupante, porque nunca se había observado.

Los escarabajos habían devastado cientos de millones de pinos de toda Norteamérica. Sin embargo, los científicos habían asumido que las secuoyas, con sus taninos repelentes de bichos, eran inmunes a esas plagas. Los expertos, preocupados, investigaron si la combinación de la sequía y los incendios forestales, ambos agravados por el cambio climático, habían hecho que las secuoyas fueran susceptibles a las invasiones de insectos nocivos.

Las secuoyas gigantes de California pueden vivir durante más de 3 mil años. Sus troncos pueden medir dos coches de diámetro y sus ramas pueden extenderse a más de 90 metros de altura.

Pero estos ejemplares no son los únicos en perecer pues, de la pérdida arbórea global, casi dos docenas de científicos de todo el mundo examinaron más de 160 estudios previos y combinaron sus hallazgos con imágenes por satélite. Su análisis revela que, entre 1900 y 2015, se perdió más de un tercio de los bosques primarios del mundo.