Ana Luisa Cantoral
Ante la ausencia de políticas públicas y la concientización de la ciudadanía, el maltrato animal sigue ganando terreno, las denuncias tanto de maltrato, tortura, así como envenenamiento van en aumento sin que existan acciones concretas o una responsabilidad de las autoridades competentes.
Habitantes de Residencial Santa María Atzompa, denunciaron que de forma constante, hay un grupo de personas que envenenan a los caninos y que a pesar de que muchos vecinos están en contra, nadie hace nada, ya que dijo han sido amenazados, amedrentados y hasta acosados por quienes están matando a los animales, por lo que prefieren mantenerse en el anonimato para evitar represalias.
Los denunciantes e inconformes hacen un llamado a las autoridades municipales, para que tomen cartas en el asunto, promuevan y realicen campañas de esterilización para crear conciencia en los habitantes de la ciudad, pues coinciden en que todos quieren tener mascotas, pero nadie se preocupa de los cuidados que deben tener y las obligaciones de quienes los adquieren.
Hilda Toledo Salinas, activista animalista, declaró hace un par de días que este mal se debe al desinterés total, tanto de la ciudadanía que no tiene conciencia en la obligación de esterilizar a sus mascotas, como también de las autoridades municipales y estatales de realizar de forma humana una atención a estos animales, a través de campañas.
Urgió a las autoridades municipales y estatales a atender la gravedad del problema que ya se ha convertido en un problema de salud pública, pues dijo, no solo es el maltrato animal, si no que muchos de ellos no han sido vacunados contra la rabia, lo que representa un peligro para todas las personas.