Juan Antonio Ilescas
Por varias razones, la actividad comercial en el mercado de abasto ha caído hasta en un 40 por ciento, ya no se vende como antes, hay mucha inseguridad, no hay circulante, varios negocios han cerrado y hasta se ofrecen locales en renta.
Es el panorama que enfrentan comerciantes de todas las ramas y que mes con mes hacen grandes esfuerzos para el pago de renta y empleados.
La inseguridad ha golpeado fuerte a ese centro comercial; por todos lados hay gente cometiendo robos y consumiendo drogas.
La policía no hace gran cosa para disminuir el fenómeno delictivo, por eso, comerciantes y ciudadanos han puesto el ejemplo castigando a cada ladrón que capturan.
Las ventas disminuyeron el año pasado después del sismo de septiembre, algunos comerciantes que daban crédito a la palabra, tuvieron pérdidas pues sus deudores ya no regresaron a pagar.
Así lo explica Severiano Ruíz, dueño de un espacio en la zona de bodegas, quien no pierde la esperanza de que se compongan las cosas ya que la central de abasto es el medio de sustento de miles de familias.
Explica que es necesaria la reactivación económica, pero también atacar la inseguridad.