Juan Antonio Ilescas
Bajo estrictas medidas de seguridad y con apoyo de personal de otras instituciones, la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca (SSPO) realizó la segunda “cuerda” de reos que esta madrugada trasladó del reclusorio de Matías Romero, en el Istmo de Tehuantepec al Centro de Readaptación Social de Tanivet.
La SSPO informó que esta acción derivó de dictámenes de Protección Civil que concluyen que ese espacio no cuenta con medidas de seguridad y salubridad para seguir operando como centro penitenciario, luego de los sismos del 2017.
Son más de 150 internos los que fueron sorprendidos por un operativo policial y confinados en el centro de internamiento ubicado en jurisdicción de Tlacolula de Matamoros.
“No hubo un anuncio, ni explicación del motivo del traslado”, señalaron familiares de los presos a quienes no se les dio la menor oportunidad de empacar sus pocas pertenencias.
En el operativo de traslado participaron policías federales, personal de la Guardia Nacional, enviados de la Defensoría de Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca y elementos de la Policía Estatal.
El 7 de septiembre pasado, 183 reos del penal de Juchitán fueron desalojados de ese centro de reclusión que sufrió daños estructurales con el sismo del 2017 y enviados al centro de internamiento en Tanivet.
En junio pasado, la población carcelaria de Matías Romero se quejó de las condiciones de hacinamiento en que las autoridades los mantenían, pues en el lugar existía sobrepoblación y malas condiciones de alimentación.