Deimos Sánchez
Las 31 muertes maternas registradas durante el 2018, evidencian que en los Servicios de Salud de Oaxaca, hay poca sensibilidad física, cultural, financiera e incluso una baja calidad en la atención médica.
Con estos números, Oaxaca se colocó la quinta entidad del país con la mayor tasa anual por estos fallecimientos, con un total de 31 casos en 2018, según el reporte de la Dirección General de Epidemiología de la Secretaría de Salud del gobierno federal.
El estado finalizó el último periodo de 12 meses únicamente por debajo de Chiapas (77), Estado de México (73), Veracruz (38) y Jalisco (36), detalló la dependencia.
La Secretaría refirió que, respecto a las cifras documentadas de esta entidad, 18 mujeres perecieron en clínicas de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), siete en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), cinco en sitios ajenos a unidades hospitalarias (sin atención) y una en el IMSS-Prospera.
El número de decesos ocurrido en Oaxaca representaron el 4.6 por ciento del total de casos del país, un total de 667.
La Secretaría de Salud también explicó que dos casos de muertes maternas no fueron considerados en sus estadísticas finales, debido a que fueron reportadas de manera tardía por las autoridades locales.
Las principales causas de defunción a nivel nacional fueron hemorragia obstétrica (23.2 por ciento), enfermedad hipertensiva, edema y proteinuria en el embarazo, parto y puerperio (21.7 por ciento) y Aborto (8.7 por ciento), sepsis y otras infecciones puerperales (5.4 por ciento), embolia obstétrica (5.1 por ciento), complicaciones venosas del embarazo (4.9 por ciento) y enfermedades del sistema respiratorio (4.5 por ciento).
Las entidades federativas que presentan una Razón de Mortalidad Materna (RMM) mayor a la nacional (30.2) son Campeche, Chiapas, Chihuahua, Coahuila, Durango, Michoacán, Nayarit, Oaxaca, Quintana Roo, Sinaloa, Tamaulipas y Yucatán.
Con siete días en promedio, la dependencia refirió que las autoridades oaxaqueñas fueron unas de las seis que más tardaron en notificar a la Federación los casos de muertes maternas suscitados en su jurisdicción.
El gobierno de Guanajuato tardó, en promedio, ocho días en reportar cada suceso; Estado de México, también ocho; Ciudad de México, ocho; Durango, 10, y Baja California, más de 12 días.
