Redacción —
Poco que celebrar mientras siga prolongándose el desabasto de medicamentos.
Con una plantilla de 600 trabajadores el Hospital de la niñez Oaxaqueña cumple hoy 22 años de servicio y compromiso con la infancia de los oaxaqueños.
Y lo hace pese a la contingencia sanitaria que hasta el momento ha atendido a 80 menos que se han contagiado del nuevo coronavirus.
Los niños con cáncer son los que más padecen pues el abasto de sus medicamentos está a y 85 % sin embargo ha habido momentos en que la cifra ha descendido hasta en un 60 %.
Directivos del nosocomio informan que este opera con un presupuesto de 40 millones de pesos anualmente pero, para operar como se debe debería de recibir 90 millones, es decir trabajan como menos de la mitad del recurso requerido.
Antes de 1998, la mayoría de los menores de 18 años que requerían una atención médica de alta especialidad eran referidos a Puebla o a la Ciudad de México y, algunos familiares al no poder sufragar o conseguir los gastos de traslado y permanencia preferían regresarse con sus pacientes a sus comunidades, esperando la mayor de las veces un desenlace fatal.
Seguramente este panorama motivó a un grupo de Oaxaqueños que contagiados por el entusiasmo del Dr. Guillermo Zárate Mijangos, constituyeran el 26 de abril de 1995 el Patronato Pro-Hospital del Niño Oaxaqueño, A. C., que con aportaciones nacionales y extranjeras, públicas y privadas, de personas físicas y morales inició la construcción del Hospital el 30 de abril de 1996 en el lugar que hoy ocupa.
El Hospital de la Niñez Oaxaqueña fue inaugurado el 29 de octubre de 1998 e inició sus actividades de atención médica el 16 de noviembre del mismo año con una plantilla laboral de 148 trabajadores, entre los que se contaban médicos especialistas, enfermeras y trabajadores administrativos, otorgando servicios de consulta médica, hospitalización, cirugías, laboratorio clínico, imagenología y servicio de transfusión. Su operación dependía entonces del propio Patronato con recursos obtenidos de donativos de particulares, empresarios y de organizaciones no gubernamentales.
