Redacción MVM Digital
Aún son muchas las familias que esperan a que el gobierno los apoye con la reconstrucción de sus viviendas, aquellas que no soportaron el sismo del siete de septiembre, en el Istmo de Tehuantepec, viviendas que a pesar de que fueron censadas tanto por gobierno federal como estatal continúan derrumbadas. Un ejemplo claro es la casa donde vivía doña Nancy Pineda, quien cuenta con un techo fracturado, así como las paredes y el piso quebrado, haciendo que su hogar dejara de ser habitable.
Fue hace cuatro años, cuando el gobierno entregó 15 mil tarjetas con 120 mil pesos cada una para la construcción de siete mil 400 viviendas nuevas, y al mismo tiempo otorgo, siete mil 600 tarjetas con 15 mil pesos cada una para reparar siete mil 600 casa que tuvieran solo daños parciales, sin embargo, del total entregado, poco más de cinco mil personas damnificadas fueron excluidas de este beneficio. Fue en 2019 cuando se pudieron ayudar a 839 personas más, aquellas que demostraron que sus inmuebles registraron daños totales.
Don Rafael Luis, es otro de los miles de ciudadanos que perdieron sus hogares, y quien hasta la fecha de hoy se encuentra a la espera de su apoyo del gobierno, pues señala que dejó de vivir en su casa, la cual se encuentra fracturada por los sismos, y dice que a pesar de que fue visitado por personal de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, la Comisión Nacional de Vivienda y de la CEVI, pues luchan día con día por arreglar su vivienda, ya que la ayuda de 15 mil pesos que esperaba nunca llegó.
Tanto autoridades municipales como vecinos han exigido al gobierno que los apoye, por ello tanto doña Nancy como don Rafael forman parte de un Comité de Vecinos del Segundo Censo y Damnificados de los Sismos, presidido por Armando Pineda, quien declara que ya los han atendido, pero que, sin embargo, no les gusta la respuesta de las autoridades, pues les ofrecen un apoyo de tan solo mil 500 a cinco mil pesos.